Estos cursos están pensados para diferentes públicos con diferentes necesidades en diferentes franjas horarias, pero tienen en común la pasión por la llevar la cocina a todo el mundo.
No pasa nada si no sabes ni freír un huevo, solo necesitas ganas de pasar una tarde agradable, aprendiendo algo nuevo.
No tengas miedo de venir solo, Punto Cook tiene un ambiente distendido y agradable en el que encajaras enseguida.
Lo mejor del taller viene al final, degustaremos los manjares que hemos preparado sentados en una mesa glam y con un buen vino. ¡Planazo!